Los actores privados, particularmente las empresas transnacionales, se han beneficiado ampliamente de la globalización, acumulando un amplio poder que, en contraparte, no ha sido acompañado por el establecimiento de obligaciones correspondientes. A través de sus actividades, tanto a nivel local como transnacional, las empresas siguen causando o contribuyendo a violaciones de los derechos humanos y del medio ambiente. Las comunidades afectadas por las actividades empresariales luchan por obtener justicia y reparación.
La FIDH hace un llamado para que los Estados y los actores económicos se aseguren de que sus inversiones, la exportación de bienes y servicios y los proyectos de desarrollo (como la minería a gran escala, los proyectos de infraestructura o la venta de tecnologías de vigilancia) no lleven a violaciones de los derechos humanos y beneficien realmente a la población local. La FIDH documenta casos de violaciones a los derechos humanos relacionados con las actividades empresariales mediante una metodología de evaluación de impacto en los derechos humanos impulsada por las comunidades afectadas.
La FIDH recurre a mecanismos judiciales y no judiciales para asegurar la rendición de cuentas de los actores implicados y para que las comunidades afectadas tengan acceso a la justicia. La FIDH propugna por la creación de marcos legales más exigentes para prevenir, sancionar y remediar los abusos causados por las actividades empresariales. En las Naciones Unidas, la FIDH participa en el proceso de elaboración de un instrumento internacional jurídicamente vinculante para regular las actividades de las empresas en relación con los derechos humanos (ver proceso del tratado).
Asimismo, la FIDH hace parte del Comité Consultivo del Programa Mundial de Cumplimiento Social (GSCP).
La FIDH también es miembro de la Red-DESC, la OECD Watch, la Coalición contra las exportaciones ilegales de vigilancia (CAUSE, por sus siglas en inglés) el Consorcio ETO y la plataforma de ONG de desguace de busques (NGO Shipbreaking Platform). A nivel europeo, la FIDH es miembro del Comité Directivo (Steering Group) de la Coalición Europea por Justicia Corporativa (ECCJ).