Más de cuatro meses después de la sentencia del Tribunal de Casación, que había declarado incompetente a la justicia francesa en un caso de crímenes contra la humanidad cometidos en Siria, el Tribunal de Apelación ha establecido una interpretación menos restrictiva de la condición de doble incriminación, que se había introducido en la legislación francesa en agosto de 2010.
"Es una excelente noticia para las partes civiles. Ahora esperamos que se pueda celebrar un juicio en Francia que aclare el destino de los 4 de Duma y haga justicia a las víctimas sirias" author= Afirmó Mazen Darwish, director del Centro Sirio para los Medios de Comunicación y la Libertad de Expresión (SCM).
"La sala de instrucción siguió la petición de la fiscalía y nuestra posición como parte civil al confirmar la competencia de los tribunales franceses en este caso. Esperamos que esta decisión sirva para recordar la importancia del papel de la jurisdicción universal en la lucha contra la impunidad de los delitos más graves". author= dijeron Marc Bailly, Patrick Baudouin y Clémence Bectarte, el equipo letrado de las partes civiles.
Antecedentes: crímenes en Siria y Jaysh Al Islam
El 29 de enero de 2020, Islam Alloush, antiguo portavoz de Jaysh Al Islam ("El Ejército del Islam"), fue detenido y acusado por la Unidad de Crímenes contra la Humanidad del Tribunal de Primera Instancia de París de crímenes de guerra, tortura y desapariciones forzadas, así como de complicidad en estos crímenes. Esta detención marcó el inicio de la primera investigación judicial sobre los crímenes cometidos en Siria por el grupo rebelde islamista. Activo principalmente en la zona este de Guta, un suburbio de Damasco, Jaysh Al Islam ha sido acusado periódicamente de cometer crímenes internacionales contra la población civil que vivía bajo su dominio desde 2011 hasta 2018.
Este grupo también es sospechoso de secuestrar, detener y torturar al abogado de derechos humanos Razan Zaitouneh, a Wael Hamada, cofundador de los Comités de Coordinación Local (CCL), y a sus colegas Samira Al-Khalil, activista política, Nazem Al Hammadi, abogado de derechos humanos. Fueron secuestrados en diciembre de 2013, mientras se encontraban en las oficinas conjuntas del Centro de Documentación de Violaciones de Derechos Humanos (VDC) y de Pequeños Proyectos de Desarrollo Local (LDSPS) en Duma.
El 26 de junio de 2019, la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH), el SCM y la Liga de Derechos Humanos (LDH) habían presentado una denuncia contra Jaysh Al Islam, por los crímenes cometidos por el grupo. Nuestras organizaciones acompañan a las familias de Razan, Wael, Samira y Nazem, así como también a otra veintena de víctimas y sus familias en su búsqueda de justicia.