13 de octubre de 2022 Días antes de la 8ª sesión para debatir el tratado de las Naciones Unidas (ONU) sobre empresas y derechos humanos y precisamente cuando se está debatiendo acaloradamente en Bruselas un proyecto de directiva europea sobre la diligencia debida de las empresas en materia de sostenibilidad, la Federación Internacional por los Derechos Humanos (FIDH) y seis organizaciones de la sociedad civil publican un estudio de expertos en el que explican el modo en que las normas de la Unión Europea (UE) y las normas internacionales de responsabilidad empresarial pueden reforzarse mutuamente.
En el estudio, Nadia Bernaz, Markus Krajewski, Kinda Mohamadieh y Virginie Rouas, cuatro notables juristas, explican que ambos instrumentos son comparables, a pesar de que su naturaleza es diferente. Ambos contienen disposiciones para regular el respeto de los derechos humanos por parte de las empresas, previniendo y poniendo fin a los impactos negativos que causan sobre las personas y el planeta, así como estableciendo normas para proporcionar reparación y acceso a la justicia, mientras que el Tratado de la ONU cuenta también con una importante perspectiva sobre los obstáculos transnacionales que obstaculizan la justicia. La publicación ofrece un útil panorama del reparto de competencias entre la UE y los Estados miembros, para después analizar y comparar el contenido de los proyectos propuestos.
El análisis demuestra claramente que no se puede sustituir simplemente un instrumento por otro, no solo son complementarios por naturaleza, sino que existen numerosas oportunidades para que ambos procesos sirvan de inspiración y refuerzo mutuo.
Las ONG que encargaron el estudio –CIDSE, la Coalición Europea por la Justicia Corporativa (ECCJ), el Centro Europeo para los Derechos Constitucionales y Humanos (ECCHR), FIAN, FIDH, Amigos de la Tierra Europa y SOMO– publican asimismo sus principales conclusiones del estudio, con recomendaciones firmes para la Unión Europea y sus Estados miembros:
• La Comisión Europea y el Servicio Europeo de Acción Exterior deberían presentar inmediatamente una recomendación al Consejo con el fin de establecer una posición común y obtener un mandato para participar en las negociaciones del Tratado de la ONU. Además, los Estados miembros deberían trabajar para velar por que la UE presente dicha solicitud lo antes posible.
• La UE y sus Estados miembros deberían participar de forma activa y constructiva en las negociaciones del Tratado de las Naciones Unidas, entre otros, en la próxima 8ª reunión del Grupo de Trabajo Intergubernamental de Composición Abierta, que tendrá lugar del 24 al 28 de octubre de 2022.
• La Comisión Europea, el Parlamento Europeo y los Estados miembros deberían establecer instrumentos europeos e internacionales complementarios y ambiciosos que definan obligaciones empresariales firmes y sustantivas y se esfuercen por que existen unas disposiciones sólidas sobre responsabilidad, acceso a la justicia y recurso efectivo para las personas afectadas.
Lea las principales conclusiones del estudio para la sociedad civil (en inglés):
Lea el estudio completo de los expertos (en inglés):