Lee aquí nuestra carta, firmada por 15 ONG
"Debido a la pasividad de los socios del régimen saudí, las personas defensoras de los derechos de las mujeres Loujain Al Hathloul, Nassima Al Saddah, Samar Badawi, Nouf Abdulaziz, Miyaa Al Zahrani y Mohammed Al Bajadi permanecen entre rejas desde 2018. Varias de ellas han sido objeto de torturas, abusos sexuales y otros malos tratos y no pueden ejercer su derecho a tutela judicial efectiva. Sin embargo, estas personas activistas han estado en la primera línea de la defensa de los derechos humanos en su país, empezando por el derecho de las mujeres a conducir", denunció Alice Mogwe, presidenta de la FIDH.
Hace un año, David Castera, director del Rally Dakar, acogía con satisfacción "la apertura" del país por parte de las autoridades saudíes y veía en la celebración de la carrera una oportunidad de apoyar el derecho de las mujeres a conducir. Sin embargo, en el marco de esta supuesta apertura, aunque se permitió a las mujeres conducir desde junio de 2018, las personas que lucharon para defender este derecho continúan en la cárcel.
Un año después, la represión orquestada por las autoridades saudíes contra la defensa de los derechos humanos se ha acelerado. Se está juzgando a las mujeres que participaron en la campaña #WomensRight2Drive. Es el caso de Loujain Al Hathloul, que recibió el Premio de la Libertad 2020 del Foro Mundial de la Paz de Normandía y permanece detenida desde mayo de 2018, momento que marcó el inicio de la represión contra las personas defensoras de los derechos humanos de las mujeres saudíes. En noviembre de 2020 su caso se remitió a un tribunal especializado en terrorismo. Este Tribunal Penal Especial es conocido por incumplir las normas de un juicio justo. Loujain Al Hathloul se enfrentaba a penas de hasta 20 años de cárcel por, entre otras cosas, "ponerse en contacto con Amnistía Internacional y Human Rights Watch", "solicitar un puesto de trabajo en las Naciones Unidas" y "enviar información" sobre la situación de los derechos humanos a los mecanismos de las Naciones Unidas.
Tras varios aplazamientos y 958 días en prisión preventiva, Loujain fue condenada ayer a cinco años y ocho meses de cárcel. El tribunal ha suspendido dos años y diez meses de su sentencia y ha computado el tiempo que ha pasado encarcelada, por lo que probablemente Loujain será puesta en libertad en febrero de 2021. No obstante, todavía deberá cumplir tres años de libertad condicional y una prohibición de viajar de cinco años.
En este contexto, el Rally Dakar no debe convertirse en una cortina de humo que oculte la injusticia. Los valores del deporte son incompatibles con los de un Estado que tortura a las activistas o asesina a sus periodistas. Las personas participantes en el Rally deben aprovechar esta oportunidad para convertirse en defensoras de los derechos humanos. Este es el significado del hashtag de la campaña #StandWithSaudiHeroes.
Nuestras organizaciones forman parte de las 15 ONG que recomiendan, en una carta conjunta, que la organización del evento, quienes participan en él y los medios oficiales insten a las autoridades saudíes a retirar todos los cargos contra las personas defensoras de los derechos de las mujeres saudíes y a poner en libertad inmediatamente a quienes se encuentran detenidas. Los hombres y mujeres pilotos del Rally deben pronunciarse y presionar a las autoridades saudíes para que tomen medidas. Nuestra campaña pide a estas personas, así como a quienes simpatizan con la causa de las personas defensoras de los derechos humanos de las mujeres saudíes a que utilicen el hashtag #StandWithSaudiHeroes y lleven un brazalete rosa en señal de solidaridad.