La FIDH está sumamente preocupada por la detención arbitraria de Nabeel Rajab desde el 13 de junio de 2016 y la confirmación de su condena en apelación el pasado 22 de noviembre, después de cumplir dos años de encarcelamiento. Asimismo la FIDH está consternada por los procesos judiciales en curso en su contra, que pueden conducir a una condena de otros quince años de cárcel más. La próxima vista está prevista para el 31 de diciembre de 2017.
La salud de Nabeel se ha deteriorado considerablemente. Después de ser hospitalizado, su regreso a la cárcel se ha caracterizado por nuevas persecuciones y condiciones de detención humillantes y degradantes. Golpeado a su llegada, despertado y registrado en medio de la noche, confiscaron su ropa y su material de aseo y se le sometió a un trato humillante. Además, la FIDH muestra su preocupación por que durante su detención se denegó el acceso a los familiares y abogados de Nabeel Rajab.
La FIDH señala que el patrón general de acoso contra Nabeel Rajab, entre otros elementos de sus condiciones de detención, deriva directamente y es una intención dirigida a sancionar su trabajo de derechos humanos. Hoy día, la vida de Nabeel está en peligro.
Nabeel Rajab ha estado en el punto de mira en los últimos años debido a sus comentarios publicados en Twitter en 2015, en los que denunciaba las condiciones de detención en la cárcel de Jaw y la guerra en Yemen. La actual detención arbitraria del Sr. Rajab es una prueba más del aumento del acoso dirigido contra la sociedad civil de Bahrein.
El embajador de Bahrein en Francia, el Sr. Mohammed Abdulghaffar Abdulla recibió el 24 de noviembre a una delegación del BI de la FIDH. La FIDH solicita la puesta en libertad inmediata de su secretario general adjunto e insiste que las autoridades de Bahrein deberán rendir cuentas por la salud y la vida de Nabeel.
Por lo tanto, el Buró Internacional de la FIDH insta a las autoridades de Bahrein a:
i. Poner en libertad de forma inmediata e incondicional al Sr. Nabeel Rajab;
ii. Respetar el derecho de visita de los familiares en la cárcel una vez por semana, así como el acceso sin obstáculos a sus abogados y la inmediata mejora de sus condiciones de detención, de conformidad con la normativa aplicable;
iii. Proporcionar a su familia acceso completo a su historial médico y garantizar que recibe el tratamiento médico necesario;
iv. Poner fin a cualquier acto de acoso, incluido de tipo judicial, contra Nabeel Rajab y contra todos los defensores y defensoras de los derechos humanos en Bahrein;
v. Velar por que se respeten en toda circunstancia los derechos humanos y las libertados fundamentales, de conformidad con las normas e instrumentos internacionales sobre derechos humanos ratificados por Bahrein
v. Permitir a los organismos de las Naciones Unidas y a los periodistas el acceso incondicional al país y visitar a Nabeel Rajab y otros prisioneros de conciencia encarcelados.
Asimismo el Buró Internacional de la FIDH insta a la Unión Europea y a Alto Representante y vicepresidenta Mogherini a cumplir con el compromiso de “continuará prestando su apoyo absoluto a quienes aboguen por la libertad, la democracia y los derechos humanos en todo el mundo”, incluso condenando públicamente la actual detención arbitraria de Nabeel Rajab, en claro incumplimiento del derecho internacional de derechos humanos.
Por último, el Buró Internacional de la FIDH insta al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas a que, con motivo de su próxima sesión, aprueben una resolución sobre la situación de los derechos humanos y la detención arbitraria de defensoras y defensores de los derechos humanos en Bahrein, entre otros, Nabeel Rajab.