El 8 de noviembre de 2021, el Fiscal General de la Federación Rusa y la Fiscalía de la ciudad de Moscú presentaron sendas denuncias administrativas para solicitar, respectivamente, la liquidación de International Memorial y de la organización miembro de la FIDH, el Centro de Derechos Humanos "Memorial".
Los principales motivos de las dos denuncias contra las ONG de derechos humanos más antiguas y respetadas de Rusia incluyen el supuesto incumplimiento de la ignominiosa ley de "agentes extranjeros", incluido el requisito de etiquetar todo el material como producido por un "agente extranjero". HRC Memorial también fue acusada de justificar el terrorismo y el extremismo, lo que amenaza a sus empleados con cargos penales y penas de prisión.
Todas las acusaciones contra las dos ONG son arbitrarias, ya que su único objetivo es destruir a las organizaciones que han trabajado firmemente para documentar y remediar las violaciones de los derechos humanos garantizados por la Constitución rusa y los convenios internacionales, representar a las víctimas ante los tribunales, conmemorar a las víctimas de las represiones de la era soviética y educar al público en general sobre los derechos humanos. Estas actividades han puesto de manifiesto el carácter represivo del régimen actual y su manipulación de la memoria histórica del pasado soviético, por lo que ambos memoriales se han convertido en una piedra en el zapato de las autoridades.
Nos preocupa especialmente la justificación adicional de las acusaciones de terrorismo y extremismo formuladas contra el Memorial HRC. Estas acusaciones se derivan de las declaraciones y los documentos de análisis de HRC Memorial relativos a los presos políticos, incluida la lista de presos políticos actuales en Rusia, que mantiene y publica en su sitio web.
"En opinión de las autoridades rusas, mantener una lista de personas perseguidas por sus creencias religiosas u opiniones políticas equivale a justificar el terrorismo", señala Alice Mogwe, presidenta de la FIDH.
"Ello a pesar de la advertencia que los autores de la lista no respaldan las opiniones de los presos políticos ni su ideología. Las acusaciones de extremismo no son más que un pretexto para cerrar a Memorial por su legítima labor en materia de derechos humanos. La disolución de International Memorial y del Centro de Derechos Humanos "Memorial" es una medida draconiana que, en última instancia, perjudica no sólo a la sociedad civil, sino al público en general que se beneficia enormemente de los servicios de Memorial".
Las presentaciones simultáneas son un ataque judicial coordinado por parte de los dos organismos de control. Ambas fiscalías afirman que el incumplimiento del requisito de etiquetado de "Agente Extranjero" dio lugar a violaciones del derecho a la libertad de expresión y de los derechos del niño consagrados en los convenios internacionales. Estas absurdas afirmaciones se derivan de la ignorancia deliberada o real del derecho internacional de los derechos humanos. Las violaciones a los derechos humanos las cometen los agentes de los Estados que son parte de estos instrumentos internacionales, no las personas físicas o jurídicas que son titulares de derechos.
De hecho, es la adopción y aplicación por parte de Rusia de la ley de "agentes extranjeros" la que es contraria al derecho internacional, como sostienen numerosos órganos interestatales, ya que socava las libertades de asociación y expresión y estigmatiza a los defensores de derechos humanos como espías extranjeros. Las restricciones a la financiación de las ONG procedentes de fuentes extranjeras constituyen una injerencia ilegítima en sus actividades y producen un efecto amedrentador en su trabajo.
La audiencia preliminar en el caso de International Memorial está prevista para el 25 de noviembre de 2021, mientras que la audiencia preliminar en el caso de HRC Memorial está programada para el 23 de noviembre de 2021.