En México se beneficiaron más de 100 víctimas, a través del apoyo a colectivos de familiares de víctimas de desaparición forzada en diversos Estados del país, como Nos Queremos Vivas Neza, Familias de Acapulco en busca de sus desaparecidos y Solecito de Veracruz. Mediante apoyo de este proyecto se fortalecieron las capacidades y conocimientos de dichos colectivos a través de 38 capacitaciones y talleres.
En Colombia se dio el apoyo al Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado (“MOVICE”) y a la Coordinación Colombia Europa-Estados Unidos (“CCEEU”) y se realizaron talleres creando espacios mediante los cuales los participantes expresaron con trabajos artísticos los impactos y daños de los crímenes sufridos y el caminos de la memoria con un objetivo de sanación y contribución al Sistema de Justicia, Verdad y Reparación esto incluyo dos encuentros con 170 beneficiarios con el pueblo Wiwa y el pueblo Kankuamo.