La FIDH es una organización internacional de derechos humanos que defiende el respeto de las libertades fundamentales, entre ellas, el derecho de reunión pacífica y la libertad de expresión, así como los principios del diálogo político inclusivo entre la población y su gobierno. La afirmación de que la FIDH ha financiado protestas que piden la destitución del rey Mswati en Eswatini es absurda y contraria a su mandato. La FIDH nunca ha concedido ninguna subvención a ninguna persona u organización en Eswatini.
Según este artículo sin fundamento, en abril se celebró supuestamente una reunión en Mauricio a la que asistieron miembros del personal de la FIDH y otras personas, en la que se presentó "un proyecto para destituir al rey Mswati". Los miembros del personal de la FIDH mencionados –Justine Lavarde, consultora de la oficina del Observatorio para la Protección de los Defensores de los Derechos Humanos de la FIDH, y Hassatou Ba-Minté, jefa de la oficina de África– no tienen conocimiento de este supuesto evento y nunca han viajado a Mauricio por motivos profesionales. En contra de lo que afirma la fuente anónima que se cita repetidamente en el artículo, la FIDH no está interesada en promover un cambio de régimen en Eswatini ni en ningún otro lugar, ni participa en actividades de este tipo.
La FIDH no tiene conocimiento del supuesto informe Holding King Mswati to Account [Exigir responsabilidades al rey Mswati]; de hecho, el único trabajo reciente que ha realizado la FIDH sobre Eswatini fue una declaración conjunta emitida en julio de 2021 junto varias docenas de grupos de la sociedad civil "condenando la violenta represión del gobierno contra las protestas masivas que exigen democracia y justicia económica".
Las afirmaciones e insinuaciones que se vierten en el artículo del 22 de mayo son absurdas y la FIDH las niega en su totalidad.
Por todo ello, la FIDH exige la retractación inmediata de este artículo difamatorio y la publicación de una rectificación.