El 27 de mayo de 2022, los miembros del parlamento centroafricano votaron por aclamación la ley que propone la abolición de la pena de muerte en el país. Aunque no se practicaba la pena capital desde 1981 y se había observado una moratoria de facto sobre las ejecuciones, nuestras organizaciones se congratulan de esta exclusión oficial, en la ley, de la pena de muerte como sanción penal.
"La abolición de la pena de muerte en la República Centroafricana es un paso más en la tendencia del continente en este sentido y, de forma más general, hacia un mayor respeto de las normas internacionales de derechos humanos", afirma Alice Mogwe, presidenta de la FIDH, que está firmemente comprometida con la abolición de la pena de muerte en el continente.
Sin embargo, nuestras organizaciones insisten en la necesidad de que la República Centroafricana proceda promulgar rápidamente esta ley para confirmar el proceso de abolición de la pena de muerte a escala nacional. Alientan asimismo al país a ratificar el Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos destinado a abolir la pena de muerte, con el fin de reforzar esta decisión ya histórica.
Si se promulga la ley, la República Centroafricana se convertirá en el 24º país miembro de la Unión Africana, después de Chad en 2020 y Sierra Leona en 2021, en abolir la pena de muerte.
"Es importante señalar que la adopción de esta ley para abolir la pena de muerte se produzca precisamente en un momento en el que la República Centroafricana continúa siendo escenario de un devastador conflicto armado, en el que se cometen muchos delitos graves. Este avance lanza un mensaje claro al afirmar que es posible luchar contra la impunidad respetando los derechos humanos", afirmó Evrard Bondade, secretario general del OCDH.
"Esta ley, que no impedirá en absoluto que los criminales de guerra respondan de sus actos ante los tribunales, es un gran paso adelante para los derechos humanos", declaró Joseph Bindoumi, presidente de la LCDH.
La FIDH es miembro fundador de la Coalición Mundial contra la Pena de Muerte y actualmente miembro de su comité directivo.