Conakry y París, 31 de julio de 2024. Es el final de un juicio histórico, y la lectura del veredicto, que ha durado casi cuatro horas esta tarde en el tribunal especial de Conakry (Guinea), marcará un hito para la justicia penal internacional y la lucha contra la impunidad. La Federación Internacional por los Derechos Humanos (FIDH), su organización miembro en Guinea, la Organisation Guinéenne de Défense des Droits de L’Homme et du Citoyen (OGDH) y su socio, la Association des Victimes, Parents et Amis du 28 septembre 2009 (AVIPA), saludan este veredicto emblemático. Las tres ONG fueron parte civil y acompañaron a más de 730 víctimas en su búsqueda de justicia.
“Este veredicto es una victoria para todos los hombres y mujeres que luchan desde hace casi 15 años para que se haga justicia", ha declarado Drissa Traoré, Secretario General de la FIDH, abogado de las víctimas y miembro del Grupo de Acción Judicial de la FIDH. “Podemos estar satisfechos con la decisión que se ha dictado, que consideramos conforme a derecho, a pesar del dolor que aún sienten las víctimas. Saludamos su coraje y determinación durante los largos meses de audiencias. Esperamos que este veredicto contribuya a aliviar el sufrimiento y el luto en Guinea”, añadió.
El 28 de septiembre de 2009 y en los días siguientes, miembros de las fuerzas de defensa y seguridad de Guinea, incluidos miembros de la guardia presidencial, orquestaron una matanza en el estadio de Conakry y sus alrededores. Entre los manifestantes pacíficos concentrados en el estadio murieron al menos 156 personas y hay decenas de desaparecidos. Más de un centenar de mujeres fueron víctimas de violación u otras formas de violencia sexual, como mutilación genital y esclavitud sexual.
Doce acusados, entre ellos Moussa Dadis Camara, ex presidente de Guinea en aquel momento, fueron acusados de homicidio, asesinato, violación, agresión, tortura, secuestro y violencia sexual. En el caso de Moussa Dadis Camara y seis oficiales de alto rango, el Tribunal recalificó los cargos como crímenes de lesa humanidad. Fueron condenados a duras penas de entre 10 años y cadena perpetua.
"Este veredicto es una victoria para todos los defensores de los derechos humanos y para quienes exigen justicia. Esta decisión judicial recuerda a todos los dirigentes y fuerzas de defensa y seguridad del mundo que el tiempo para que se haga justicia es largo, pero que la lucha contra la impunidad se llevará a cabo a todos los niveles, en los tribunales nacionales, regionales e internacionales", afirma Martin Pradel, abogado de las víctimas y miembro del Grupo de Acción Judicial de la FIDH.
Un juicio tenso
El juicio, que se inició en 2022, ha estado marcado por una serie de incidentes, entre ellos espectaculares fugas de algunos de los acusados, robos en organizaciones de la parte civil y presiones y amenazas contra la sociedad civil y el tribunal. La ausencia de Claude Pivi, ex ministro encargado de la seguridad presidencial, huido desde el 4 de noviembre de 2023, aterrorizó a muchas de las víctimas, que prefirieron no acudir al tribunal y seguir el juicio en directo por televisión.
Sin embargo, la FIDH, la OGDH y AVIPA consideran que la justicia guineana ha sabido funcionar en este clima envenenado y se felicitan por la celebración de este juicio extraordinario: 22 meses de audiencias, durante los cuales se ha escuchado la voz de las víctimas. Este largo proceso judicial ha permitido revelar la verdad y movilizar a la opinión pública internacional en favor de las víctimas.
“Este juicio marcará un punto de inflexión decisivo en la historia de Guinea: rompe el ciclo de impunidad de las graves violaciones de los derechos humanos cometidas regularmente desde 1958 por las fuerzas de defensa y seguridad y los altos cargos políticos", declaró DS Bah, vicepresidente del OGDH y abogado coordinador del colectivo de abogados. “A pesar de la presión, la justicia guineana ha llevado este juicio a buen puerto. Es un ejemplo que debería inspirar a la gente más allá de las fronteras del país y animar a las víctimas a no rendirse nunca, estén donde estén en el mundo, añadió.
"Hoy culmina una batalla de 15 años. Esta fecha quedará siempre grabada en nuestra memoria. Ese día perdí a mi hijo. Compartí la tristeza de todas las víctimas y nos encontramos con muchas dificultades, recuerda Asmaou Diallo, Presidente de AVIPA. Nuestra lucha no se detendrá aquí. Continuaremos para que todas las víctimas reciban una indemnización y esto no vuelva a ocurrir en Guinea".