Israel-Territorios Ocupados Palestinos: un nuevo ciclo de violencia cuya víctima es la población civil

11/07/2014
Comunicado
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El creciente ataque de la población e infraestructuras civiles en la operación militar de Israel en la Franja de Gaza, denominada “Margen Protector”, es inaceptable.

La Red Euromediterránea de Derechos Humanos (EMHRN, en sus siglas en inglés) y la FIDH piden a la UE que condene el ataque deliberado y asesinato de civiles, así como que garantice el cumplimiento por todas las partes en conflicto de sus obligaciones en materia de derecho internacional.

Durante semanas, el ejército israelí ha estado atacando la Franja de Gaza ocupada con misiles aéreos y fuego abierto tanto en la zona de exclusión como en el mar. Estos hechos se inscribían en el marco de una operación en Cisjordania, de mayor envergadura y de carácter permanente, cuyo objetivo era infligir un castigo colectivo a la población palestina por la desaparición y asesinato de tres adolescentes colonos israelíes. Israel recurrió a detenciones masivas, redadas en domicilios, uso excesivo de la fuerza y bloqueos en todo el territorio palestino.

El pasado 8 de Julio de 2014, Israel aumentó la intensidad de sus ataques a la Franja de Gaza con el lanzamiento de la operación militar “Operación Margen Protector”. Desde entonces, la aviación israelí ha lanzado numerosos ataques aéreos en diferentes partes de la Franja. A las 13.00 del 10 de Julio de 2014, 76 personas palestinas, de las cuales 20 eran niñas y niños y 10 mujeres, habían sido asesinadas, mientras que al menos 400 palestinos,123 eran niñas y niños y 86 mujeres, habían resultado heridas. Seis de los menores fueron asesinados por un misil israelí lanzado sobre un domicilio palestino en Khan Younis el pasado martes. Una mujer de 80 años fue asesinada en el centro de Gaza el miércoles. Mientras tanto, aproximadamente 250 cohetes y proyectiles han sido lanzados a Israel desde la Franja de Gaza. Estos ataques constituyen un ataque deliberado contra la población civil israelí. Según el Derecho Internacional Humanitario, el asesinato indiscriminado y desproporcionado de civiles en el contexto de un conflicto armado está estrictamente prohibido y puede constituir un crimen de guerra.

Igualmente, Israel ha destruido de forma deliberada hogares e infraestructuras civiles. A las 13.00 de ayer 10 de Julio de 2014, 334 viviendas y estructuras habían sido dañadas, 89 de las cuales habían sido totalmente destruidas. El 8 de Julio, el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel anunció que el ejército israelí había bombardeado de forma deliberada cuatro viviendas de personas definidas como activistas superiores de Hamas. Israel debe distinguir en todo momento entre infraestructuras civiles y objetivos militares. La destrucción de esas casas no es, por tanto, permisible si no está motivada por un imperativo militar. En estas situaciones, seleccionar como objetivo estas viviendas constituye una violación del Derecho Internacional Humanitario y sitúa a los residentes civiles en una situación de riesgo innecesario de sufrir daños.

En el marco del creciente discurso provocador por parte de las autoridades israelíes, y amenazas de una escalada de la violencia, se ha intensificado la violencia ejercida por la población colona y los ataques a población civil palestina como represalia. Algunos colonos atropellaron a un niño palestino de 9 años y quemaron vivo al adolescente de 16 años Muhammad Hussein Abu Khdeir, después de haberlo secuestrado. Estos ataques han estado acompañados por campañas de incitación a la violencia. El pasado 1 de Julio, activistas de extrema derecha celebraron en Jerusalén la “Marcha de muerte a los árabes”, como llamamiento a la venganza por la muerte de los tres adolescentes colonos, mientras que el Secretario General del Movimiento Mundial de Jóvenes pedía al Gobierno convertir las fuerzas israelíes en un ejército de vengadores.

En tanto que fuerza ocupante, Israel tiene la obligación de mantener el orden público y de garantizar la seguridad de la población civil palestina en Cisjordania y la Franja de Gaza. Como tal, Israel debe proteger a la población que vive bajo la ocupación, así como sus propiedades, de los actos de violencia cometidos por la población colona israelí. Igualmente, Israel debe asumir la responsabilidad por estos hechos y proporcionar a la población palestina soluciones efectivas y acceso a la justicia.

Las organizaciones abajo firmantes reclaman a la UE y a sus estados miembros que:

  • Condenen, de forma inmediata e inequívoca, los ataques indiscriminados sobre la población civil y, en particular, sobre niñas, niños, mujeres y personas mayores.
  • Exijan que Israel asuma su responsabilidad por todas las violaciones del Derecho Internacional Humanitario y el Derecho Internacional de los Derechos Humanos, incluyendo la realización de investigaciones que cumplan la normativa internacional, la persecución de los responsables y la garantía del acceso a los tribunales, a la reparación y a la compensación a las víctimas por los daños sufridos.
  • Exijan a Israel el cumplimiento de sus obligaciones como fuerza ocupante, lo que incluye mantener el orden público y garantizar la seguridad de la población palestina en Cisjordania y la Franja de Gaza.
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