Llevar el Foro Social Mundial a Davos: el Caucus de derechos Humanos pide a los Estados y a las empresas presentes que asuman su responsabilidad en materia de derechos humanos

«Actualmente las víctimas de violaciones de derechos humanos no saben donde reivindicar sus derechos o quien es responsable de su sufrimiento» afirma Souhayr Belhassen, presidente de la Federación internacional de derechos humanos (FIDH), describiendo la realidad de los derechos humanos en muchos países. «En Davos, durante el Foro económico mundial, debemos sensibilizar acerca de la ausencia de responsabilizacion en materia de derechos humanos en el mundo».

En el contexto del Dia de acción global del Foro Social Mundial 2008, el Caucus de derechos humanos (Human Dignity and Human Rights Caucus-HDHRC), una coalición que reúne organizaciones de derechos humanos y de desarrollo, solicita a los Estados y a las empresas multinacionales que pongan fin a las violaciones de derechos humanos. Particularmente los pobres sufren el dramático incremento de las violaciones de sus derechos mas básicos. La población marginalizada en las áreas rurales se encuentra confrontada a la imposibilidad persistente de ver realizados sus derechos a la tierra, al agua, a las semillas y a los servicios sociales. Frecuentemente son víctimas de expulsiones y su tierra se utiliza para el desarrollo de infraestructuras o para la extracción de recursos. En muchos países, los conflictos crecientes y la militarización están haciendo de la cultura de la impunidad una realidad cotidiana. Estamos viendo un crecimiento rápido de los desplazados internos, de los trabajadores migrantes, de los refugiados y de toda
una serie de grupos confrontados a la denegación de sus derechos en tanto que ciudadanos. Las mujeres son frecuentemente las mas afectadas.

Teniendo en cuenta que el Foro económico mundial de 2008 dedica una atención considerable al medio ambiente, el caucus remarca la relevancia de la Declaración universal de derechos humanos en el debate actual sobre el cambio climático, los desechos tóxicos y la energía. Los ataques al medio ambiente afectan directamente el derecho a la vida, a la salud, al agua, al desarrollo, a una vivienda digna, al trabajo, a la cultura, asi como los derechos de los pueblos indígenas. La población tiene el derecho de ser protegida de las consecuencias nefastas de las actividades económicas sobre el medio ambiente, como la contaminación del agua, de la tierra y del aire, la deforestación, y la desertificación que resulta de las inundaciones provocadas por el cambio climático.

Los Estados tienen la obligación de respetar, proteger e implementar los derechos humanos proclamados en los tratados. Aunque los Estados tienen la responsabilidad de armonizar las políticas públicas y las leyes nacionales con sus obligaciones internacionales, en muchos casos sus acciones son ineficaces o conducen a violaciones de los derechos humanos. Los actores no estatales también tienen responsabilidad en materia de derechos humanos. Un numero creciente de actores privados, incluyendo empresas privadas de seguridad, rebeliones armadas, grupos paramilitares así como empresas transnacionales, están cometiendo violaciones de derechos humanos. Tales actores extraen, contaminan y destruyen los escasos recursos existentes y no respetan los derechos laborales básicos. Ciertas organizaciones internacionales también son responsables de violaciones a los derechos humanos, ya que promueven políticas económicas que contravienen los compromisos en materia de derechos humanos, privatizan la tierra y el agua, imponen precios muy elevados para los servicios de salud y financian grandes infraestructuras. Los actores no estatales son cada vez mas influyentes y su posible impacto sobre los derechos humanos se incrementa.

«La responsabilización en materia de derechos humanos no debe aplicarse únicamente a los Estados » dice Michael Windfuhr. Director de derechos humanos de Pan para el Mundo, organización protestante de desarrollo basada en Alemania. « Deben rendir cuentas todos aquellos que son responsables de violaciones de derechos humanos, incluyendo las instituciones financieras internacionales, los organismos de Naciones unidas, las agencias multilaterales, las compañías públicas y privadas, los gobiernos extranjeros influyentes, los intereses locales privados, las organizaciones de la sociedad civil y los individuos». En efecto, la Declaración universal de derechos humanos, cuyo 60avo aniversario se celebra este año, proclama que cada individuo y que cada órgano de la sociedad tiene la responsabilidad «de promover el respeto por los derechos y libertades mediante medidas progresivas, nacionales e internacionales».

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