El Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (CDESC) de la ONU examinó la situación de Belarús en noviembre de 2013 y publicó sus conclusiones, en las que urge a Belarús a abolir el uso del trabajo obligatorio como medida punitiva. Belarús también fue condenado por la violación generalizada de los derechos de los trabajadores, incluido el derecho a formar parte de sindicatos libremente y sin injerencias.
La FIDH y su liga miembro el Centro de Derechos Humanos "Viasna" se congratulan de las conclusiones de la ONU que reflejan ampliamente sus recomendaciones conjuntas, publicadas en el informe "Trabajo forzado y violaciones generalizadas de los derechos de los trabajadores en Belarús". En este informe se mencionan otras cuestiones importantes, a saber, los subbotniks (un sistema organizado de trabajo no remunerado durante los fines de semana "por el bien de la sociedad"), el trabajo obligatorio en el sistema penal y en el ejército y las asignaciones obligatorias de los titulados universitarios.
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