El Tribunal de Apelación de Casablanca decidió la puesta en libertad provisional de las nueve personas detenidas pertenecientes al Movimiento 20 de Febrero, que pide reformas políticas y sociales. Detenidos el pasado 6 de abril durante una marcha sindical pacífica, los jóvenes manifestantes habían sido condenados a penas de entre cuatro meses y un año de prisión firme, tras un proceso marcado por irregularidades, y permanecían detenidos en la prisión de Okasha. Una misión internacional de la FIDH, llevada a cabo por su presidente Karim Lahidji, estuvo en Marruecos a principios de junio para llevar a cabo una investigación sobre las detenciones arbitrarias, la práctica de la tortura y las condiciones de detención. En esta ocasión, la FIDH había denunciado a las autoridades las irregularidades del proceso y había pedido la puesta en libertad provisional de los detenidos.
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